sábado, 29 de noviembre de 2014

MONTESSORI Y LA PEDAGOGÍA CIENTÍFICA

La denominada metodología Montessori, fue desarrollada en Italia por la Doctora María Montessori a partir de sus experiencias con niños en riesgo de exclusión social.
Su planteamiento se basó en la observación del comportamiento de los niños cuando no estaban supervisados por adultos, que le llevó a considerar a aquéllos como sus propios maestros y a la necesidad de crear un escenario de libertad para el aprendizaje. Este nuevo enfoque exigía, a su vez, el planteamiento de una profunda revisión de la psicología de la educación de la que, finalmente, surgieran nuevos métodos, como los que podía encontrar en los trabajos del médico francés Jean Itard, considerado el padre de la nueva pedagogía y del también francés Eduard Séguin.
Podemos citar como principios básicos de su metodología los siguientes:
-       “La mente absorbente de los niños”, en referencia a la gran capacidad de aprendizaje que reconocía en las edades más tempranas de la vida, que se debía fomentar.
-       “Los periodos sensibles”, que permiten a los niños relacionarse con el mundo exterior de un modo especialmente intenso, adquiriendo determinadas habilidades con mucha facilidad.
-       “El ambiente preparado”, cuidadosamente organizado para fomentar su auto-aprendizaje y crecimiento. El diseño de ambientes basados en los principios de simplicidad, belleza y orden, permiten el desarrollo del niño sin la asistencia y supervisión constante de un adulto.
-       “El rol del adulto”, que se convierte en un observador consciente al servicio del educando, del que también aprende y junto al que forma comunidad.
Otro de los elementos fundamentales para el desarrollo e implantación de su método fue la elaboración de un material docente que se correspondía con cada uno de los principios básicos relacionados: funcionalidad, experimentalidad, estructuración y relación.
Finalmente, creo relevante resaltar algunos aspectos de la biografía de la pedagoga que, si bien algunos pertenecen a su vida privada, demuestran su entereza y fortaleza de carácter que, sin duda, le sirvieron para coronar la meritoria trayectoria que hoy se le reconoce.
Desde su extensa formación en los campos de la pedagogía, medicina, filosofía y psicología en un tiempo en el que el acceso a la educación superior estaba vetado a la mujer, hasta la superación del problema que le supuso, después de su maternidad, el abandono de su marido, cuando la moral imperante rechazaba y marginaba a las mujeres que sufrían este tipo de problemas.                                                  

No hay comentarios:

Publicar un comentario